Pese a que tiene solo 18 años de edad, Ignacio Jerez está viviendo un nuevo sueño. Hace algunos meses triunfó en la primera temporada de Mi Nombre Es y hoy se encuentra ofreciendo shows en España, donde logró conocer a su inspiración musical de toda la vida: Raphael.
El joven que tributa a "Er Niño" viajó a la tierra de su ídolo con este doble propósito, sobre el cual contó detalles en El Medio Día: "Ha sido loco, un sueño hecho realidad. La verdad no me esperaba que nada de esto pasara tan pronto y mucho menos el encuentro con Raphael, poder verlo en vivo en su tierra natal, poder estar muy cerquita del pueblo donde nació".
Para Ignacio, estas son "cosas maravillosas que nunca nunca en la vida esperé estar viviendo".
Respecto a su encuentro con el legendario artista, comentó que "fue muy especial, fue muy emocionante. No me salían las palabras, la verdad. Estuvimos dos días seguidos yendo al hotel esperándolo para poder generar un encuentro. La prensa estuvo muy pendiente de mí, cosa que también me impresionó mucho, y se dio el momento".
Encuentro con Raphael: "Me felicitó y voy pa' elante, como él dice"
Sobre el diálogo que pudo sostener con Raphael, Ignacio cuenta que "me felicitó y voy pa' elante, como él dice. No tuvimos una conversación muy larga, pero sí me agradeció por el cariño y el amor que le tengo y yo, por supuesto, se lo demostré de todas las formas posibles".
En cuanto a lo que ha sido la recepción que ha tenido en las ciudades de España donde se ha presentado, el joven doble reconoció que "siempre hay miedo porque llegar a la tierra natal de Raphael es un reto aún mayor. Gustarle a la gente de acá es muy grande porque son personas que han crecido mucho con Raphael muy cerca de ellos, entonces lo conocen muy bien".
Agregó que "yo tenía ese miedo de quizás no gustar o que pensaran que era una caricatura o que estaba burlándome de él, pero por el contrario, lo recibieron como lo que es: un homenaje. El cariño que me han dado en este país es maravilloso".
Finalmente, trató de describir todo lo que significa Raphael en su vida: "Nunca tuve la oportunidad de expresarme mucho, siempre fui muy callado, muy tímido, el niño que escuchaba música de abuelitos, jaja, entonces me sentía siempre muy solo en ese aspecto y Raphael fue como un mejor amigo en todos esos momentos, fue un segundo abuelo, un segundo papá".