Las autoridades argentinas buscan a un hombre que este domingo lanzó una botella sobre la caravana presidencial cuando el mandatario, Javier Milei, desfilaba entre el Congreso y la Casa Rosada e hirió a un escolta.
Según desveló este lunes una imagen del canal argentino La Nación+, una botella de vidrio fue arrojada por un hombre -cuya imagen fue registrada por las cámaras de seguridad de la calle- sobre el vehículo descapotable en el que se desplazaban el economista libertario y su hermana y principal asesora, Karina Milei, e impactó sobre uno de los custodios de la caravana.
El ataque está siendo investigado por la Policía Federal Argentina (PFA), pero por el momento el ministro de Seguridad del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Waldo Wolff, confirmó en el canal TN que el agresor se llama Gastón Ariel Mercanzini.
En el video de la agresión puede verse que el objeto no alcanzó al vehículo presidencial, pero sí a un escolta, que resultó herido en el lado izquierdo del cuello.
Tras comprobar que ni el presidente ni su hermana habían resultado heridos, la caravana continuó sin detenerse hasta que, en un momento, Milei pidió parar para saludar a la gente que lo vitoreaba en la Avenida de Mayo y, por el amor que siente por los perros, para acariciar a un can que estaba también en la zona.
Según puede verse en las imágenes de las cámaras de seguridad del Gobierno porteño, el hombre lanza el vidrio desde uno de los costados de la avenida por la que se desplaza el mandatario e, inmediatamente, sigue su rumbo con paso ágil pero tranquilo.
Más allá de este incidente que se conoció hoy, la jornada de este domingo, en la que asumió Milei como relevo del peronista Alberto Fernández, estuvo marcada por una gran calma y la ausencia de sucesos reseñables, más allá de una detención por robo en las inmediaciones de la Casa Rosada (sede del Gobierno).
Tras la jura ante la Asamblea Legislativa y la imposición de los atributos presidenciales por parte de Fernández a Milei, el nuevo presidente ofreció un discurso a la ciudadanía ante el edificio del Congreso de la Nación y rodeado de importantes jefes de Estado y de Gobierno, como el rey Felipe VI o los presidentes de Chile, Gabriel Boric, y Ucrania, Volodímir Zelenski.
Posteriormente, abordó un vehículo descapotable para desplazarse hacia la Plaza de Mayo, donde se encuentra la casa de gobierno, antes de participar en una ceremonia interreligiosa en la Catedral Metropolitana y en una gala especial en el Teatro Colón para cerrar su toma de posesión.
