Según consignó Emol, la Superintendencia recibió (entre 2014 y 2024) un total de 133.357 denuncias, mientras que solo el año pasado estas llegaron a la cifra más alta de la serie: 19.109, de las cuales 13.962 fueron por convivencia escolar.
Del total de denuncias que ha recibido la Superintendencia -en su rol de fiscalización y resguardo de derechos en el sistema escolar-, en torno al 70% corresponden a convivencia escolar.
Asimismo, se evidencia un alza en denuncias que abordan temáticas más recientes instaladas en la sociedad, como la discriminación, ley de género y autismo. Materias que hace una década no eran visibilizadas, y que hoy alcanzan números importantes.
Aumento en casos de discriminación a personas autistas
Por ejemplo, denuncias relativas a casos que involucran autismo han crecido un 149%, pasando de 723 casos en 2022 a 1.799 casos en 2024. Aun cuando las denuncias van en aumento y a primera vista esto hablaría de un indicador indirecto de tensiones y demandas en las comunidades educativas, esto se debe a múltiples factores.
En los últimos años, la Superintendencia ha apuntado a fortalecer el marco normativo en todo el sistema, incluyendo los colegios particulares pagados. De esta manera, las leyes y circulares que hoy existen permiten a más familias ejercer sus derechos con mayor claridad y respaldo, como por ejemplo, frente a la Ley de Autismo o la aplicación concreta de la prohibición de discriminación.
Esta información es parte de lo que recoge el informe "Denuncias en la educación escolar y parvularia (2014-2024): evolución y nuevo enfoque de gestión", del área de Estadísticas y Estudios de dicha entidad, y al que tuvo acceso Emol.
Sobre esto, la superintendenta de Educación, Loreto Orellana, comenta que se trata de un documento inédito, puesto que es primera vez que el organismo realiza "un análisis panorámico y detallado sobre las denuncias que recibimos por parte de las comunidades educativas".
La vuelta a las aulas
Sin embargo, a partir de 2022, con el retorno a la presencialidad, se registró un repunte sin precedentes. Si en 2021 las denuncias fueron 3.961, en 2022 llegaron a 16.161. En 2024, en tanto, se alcanzó la cifra más alta de la serie: hubo 19.109 denuncias (de las cuales 13.962 fueron por convivencia escolar), lo que equivale a un alza del 67,2% más que una década atrás.
La convivencia escolar no se entiende hoy de la misma forma en que se hacía hace una o dos décadas atrás. El concepto inicialmente era más acotado y definía el "maltrato escolar", sin embargo, hoy incorpora otras problemáticas. Esto, como reflejo de una sociedad en constante cambio, evolución, y formas de relacionarse.
Así, la convivencia escolar hoy considera elementos como ciberacoso o discriminación, áreas que se hacen más presentes en las denuncias recibidas por la Superintendencia. Por ejemplo, la discriminación muestra el cambio más marcado: en solo dos años aumentó un 67%, pasando de 1.220 casos en 2022 (7,5% de las denuncias) a 2.039 en 2024 (10,7% de los casos).
En tanto, el ciberacoso, aunque con volúmenes menores, también presenta incrementos sostenidos, con alzas interanuales de 11% en 2023 y 7% en 2024.
"Nuevos" sujetos de maltrato
Otro ejemplo de la diversificación de los fenómenos relativos a la convivencia escolar es el maltrato hacia adultos en la comunidad educativa. Este alcanzó un 3,8% de las denuncias específicamente relativas a convivencia escolar en 2024, y ha duplicado su volumen desde 2022.
Las denuncias también muestran diferencias respecto al tipo de establecimiento educativo, cuyas causas son múltiples. Por ejemplo, en el sector particular subvencionado, el volumen de denuncias ha sido sistemáticamente el más alto del sistema: 6.842 casos en 2022, 6.898 en 2023 y 7.635 en 2024, con un aumento del 11,6% en el trienio y una participación de 55% del total en el último año.
En la educación pública, en tanto, las denuncias se han mantenido relativamente estables, aunque siguiendo la tendencia global, también hay alzas: en 2022 hubo 3.289 denuncias, mientras que en 2024 hubo 3.357 (+2,1%).
En los Servicios Locales de Educación (SLEP), en tanto, hay un incremento más marcado. Si en 2022 hubo 591 casos de denuncias, en 2024 se registraron 1.005, es decir, el alza llega al 70%.
El año pasado, los SLEP concentraron el 7% del total anual de las denuncias recibidas por la Superintendencia. En el caso de los colegios particulares pagados, también se evidencian alzas importantes: pasaron de 975 casos en 2022 a 1.483 en 2024.
Es decir, un incremento del 52% que los lleva a concentrar el 11% del total de denuncias recibidas en 2024. Al observar las denuncias según los distintos niveles educativos, la educación básica es la que presenta mayor carga, con 7.199 casos en 2024, lo que equivale al 51,6% del total; en tanto, en 2023, hubo 6.637 casos.
En la educación media, los casos pasaron de 3.022 en 2022 a 3.587 en 2024, un alza del 18,7%. En tanto, en la educación parvularia el crecimiento fue aún mayor: de 833 denuncias en 2022 a 1.074 en 2024 (+28,9%), alcanzando un 7,7% del total.
Por su parte, en la educación diferencial, aunque con un volumen significativamente menor, más que triplicó sus casos en el trienio (2022-2023-2024), de 65 a 222, para llegar al 1,6% del total.
El alza en el volumen de las denuncias que la Superintendencia ha recibido en la última década ha obligado a repensar las formas en que estas se gestionan y resuelven.
El foco se ha centrado especialmente en las primeras etapas de la tramitación del conflicto, proceso que está a cargo de la División de Protección de Derechos Educacionales (PDE), y que utiliza el mecanismo de Gestión Colaborativa de Conflictos (GCC), que cuenta con un programa piloto que se aplicó entre enero y abril de 2025 en las regiones de Arica y Parinacota, Valparaíso y Metropolitana.
De esta manera, al recibir la denuncia, se concentran los esfuerzos en poder resolverlo tempranamente. Dado que toda denuncia ingresa por esta vía antes de una eventual derivación a Fiscalización o a la División Jurídica, optimizar esta fase inicial es clave.