Angustia y dolor. Natalia se contactó con Muy Buenos Días a Todos para entregar su testimonio sobre el momento más difícil que vivió junto a su hija, cuando el Bullying alcanzó niveles impactantes.
Luego de varios episodios de agresiones en su colegio, la hija de Natalia resultó con lesiones en la nariz, y quedó en silla de ruedas tras ser lanzada por las escaleras. Todo por obra de sus propias compañeras.
Según explica Natalia, su hija y toda la familia se vio afectada por una profunda depresión y, pese a las denuncias y a los registros médicos, desde el colegio le aseguraron que todo se trató de un accidente.