"Es un honor recibir este reconocimiento, muchas gracias a mis queridos estudiantes", comentó el docente y director de La Orquesta Sonidos de Luz, agrupación que está integrada por músicos ciegos o baja visión.
El profesor de música que trabaja con estudiantes ciegos, Cristóbal Rojas, obtuvo el galardón luego de ganar la subcategoría “Profesor de Música” en la quinta versión del Global Teacher Prize Chile 2020, una ceremonia que se realizó ayer en las dependencias de Televisión Nacional (TVN).
"Es un honor recibir este reconocimiento, muchas gracias a mis queridos estudiantes", comentó el docente, quien además recibió 4 mil dólares por este reconocimiento.
El profesor explicó que a través de la música sus estudiantes han podido derribar barreras: “La música es una herramienta trascendental en el desarrollo humano, porque logra conectar el alma con el intelecto. En mis estudiantes veo cómo, a través de los años, la música los ha transformado en seres más confiados y con más amor propio, se sienten más capaces al adquirir nuevos conocimientos y derribar barreras”.
Cristóbal y su rol como director en La Orquesta Sonidos de Luz
Desde el 2015 el docente es director de La Orquesta Sonidos de Luz, agrupación que está integrada por músicos ciegos o baja visión, todos ex alumnos del Colegio Santa Lucía de la Fundación Luz, quienes han interpretado durante su trayectoria un variado repertorio, que va desde jazz hasta música folclórica.
Además de difundir música, el objetivo de la orquesta es trabajar la inclusión y para esto es necesario que los estudiantes desarrollen sus capacidades al máximo y que logren insertarse dentro del mundo laboral.
Cristóbal ha logrado que sus estudiantes estén en grandes escenarios junto a artistas nacionales como Joe Vasconcellos, Nano Stern y Cecilia Echeñique, entre otros.
El pandero y el bajo eléctrico que utiliza Cristóbal para dirigir a sus estudiantes
“El pandero sirve para marcar el pulso e inicio de cada tema; como metrónomo en el proceso de ensamble del repertorio; para dar aviso de cierre de obra; como seña de inicio o término de los solos, cambios de secciones, pulso y métricas. El bajo eléctrico lo escogí ya que es muy influyente en el arreglo y fundamental para la sección rítmica, armonía y melodía”, señaló.
“En esta orquesta, la música se convierte en una herramienta de resiliencia, al desarrollar en ellos la capacidad para superar obstáculos, ser constantes y persistentes. Se ha logrado potenciar su autoestima, autonomía, promover el trabajo en equipo y plantear la actividad musical como un posible campo laboral”, consideró Cristóbal.
Cabe destacar que Cristóbal utiliza el sistema de lectura Braille en algunos instrumentos para marcar las notas, así como también dentro de los equipos, tales como cables fundas y estuches.
Con información de Elige Educar