El llamado a escuchar la voz del pueblo del Puma Rodríguez en el escenario de la Quinta Vergara, se convirtió en uno de los momentos más recordados del Festival de la Canción de Viña del Mar.
En 1988, José Luis "Puma Rodríguez" entregó un gran show en la Quinta Vergara, y pese a que recibió la antorcha de plata, el entonces monstruo del certamen, pedía a a gritos la Gaviota.
Sin embargo, el reglamento del certamen de ese año impedía entregar la gaviota a los artistas invitados, ya que estaba reservada solo para la competencia. Pero el público de Viña estaba dispuesto a todo para otorgar el galardón al venezolano.
Así pasaron 15 minutos... El público no dejaba de gritar y el Puma Rodríguez guardaba silencio, hasta que de pronto, y en un complejo momento político para nuestro país, dijo: "A veces hay que escuchar la voz del pueblo".