Desde que Kim Kardashian publicó su libro de selfies muchos pensaron que nadie podía superar a la maniquí en cantidad de auto fotos que se tomaba. Sin embargo, la BBC dio a conocer el caso de Junaid Ahmed, quien tiene 22 años de edad, cuenta con más de 50 mil seguidores en instagram y se saca nada más ni nada menos que 200 fotos diarias.
Pero eso no es todo, ya que su nivel de exigencia y de perfección consigo mismo es tanto, que de las 200 fotos que se toma, sólo una llega a su cuenta de instagram. Sin embargo, si ésta instantánea no llega a los 600 "me gusta", él elimina la publicación y sube otra para conseguir la cantidad que él busca.
"Cuando publico una imagen, en el primer minuto o dos probablemente obtenga 100 me gusta y me encanta, mi teléfono se vuelve loco, es simplemente increíble", indica Ahmed a la BBC.
Sin embargo, detrás de estas sorprendentes cifras se esconde un problema mucho más grave y que afecta directamente el autoestima de las personas. Según un estudio realizado por la Universidad de Nottingham Trent y la Escuela de Administración Thiagarajar en India, la obsesión por tomarse selfies recibe el nombre "Selfitis", y agregó que, sin una persona publica más de seis fotos diarias, ésta podría presentar serios problemas de autoestima.
Si bien Junaid asegura que sus fotos en un comienzo eran más naturales, también acepta que para verse mucho mejor en sus fotos él tuvo que operarse varias zonas de su rostro: rellenó su barbilla, sus mejillas y su mentón. También se inyectó botox en los labios y debajo de sus ojos, y tatuó su cejas para que lucieran perfectas.
Pero como no todos tienen el dinero y el acceso a operarse, no todos pueden mejorar su aspecto para verse perfecto en redes sociales. Este es el caso de Danny Bowman, un joven de 23 años que a los 15 años de edad se obsesionó con las selfies, y al no encontrar la aprobación que él buscaba, intentó suicidarse a los 16 años.
"Dio vueltas y más vueltas, pasaba diez horas al día en el espejo tomándome estas fotos, día tras día", indicó Bowman a la BBC.
Luego de pasar un tiempo en rehabilitación tras sufrir un trastorno dismórfico corporal, él ahora se dedica a ayudar a otros jóvenes que tiene problemas de salud mental similares a la que él tuvo.