Benny es un perro de raza pitbull que se encontraba en una perrera, donde tenía altas probabilidades de ser sacrificado si no era adoptado pronto.
Estuvo más de un mes encerrado, con otros perros considerados de "alta peligrosidad" por sus razas. Un video muestra la timidez y miedo que Benny sentía cuando alguien se acercaba a su reja, con las orejas abajo y muy nervioso.
Pero su actitud cambia completamente cuando uno de los cuidadores se acerca y le intenta poner una correa. El perrito empieza a mover la cola con muchas ganas, y cuando lo sacan de la jaula comienza a saltar y correr eufóricamente hasta salir de la perrera.