El caso de Emiliano Sala, el jugador de fútbol que viajaba de Francia a Gales en una avioneta que desapareció pero que fue encontrada el día domingo con un cuerpo, ha estremecido al mundo entero.
El joven de 28 años acababa de ser traspasado al Cardiff City, equipo que recién había logrado el ascenso a la Premier League, pero por el cual nunca alcanzó a jugar.
Su familia no ha ocultado su pena. De hecho, su padre, Horacio Sala, declaró a Crónica TV de Argentina que esto era un "mal sueño". Pero hay alguien en esta historia que aún no logra salir de la congoja: "Nala", su mascota, quien sigue esperando que Emiliano regrese a casa.
La perrita vivía desde el año 2015 con el delantero en Nantes, Francia, y era su única compañía a diario. De hecho, el futbolista solía compartir imágenes con ella en su Instagram
El día sábado -antes que se encontrará la avioneta-, la hermana de Emiliano, Romina Sala, publicó una foto en su Facebook en la que aparece Nala, en la casa de su hermano, mirando el horizonte esperando por el retorno de su amo.
No se sabe si Nala será dada en adopción o los familiares de Emiliano la llevarán a Argentina, donde residen, pero cualquiera de las opciones no llenarán el vació que hoy tiene la perrita.