"El perro es el mejor amigo del hombre" es un dicho muy popular que de vez en cuando va cobrando sentido a medida que se van escuchando historias, como por el ejemplo, la de "Perrote", un can que persigue a su dueño hasta su lugar de trabajo y que finalmente consiguió volverse en un empleado más.
Este fiel compañero llega todos los días laborales hasta la Refinería “Francisco I. Madero” de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Tamaulipas, en donde ya tiene hasta un casco con su nombre.
Rocío Patiño, protectora de animales, en conversación con Heraldo de México, sostuvo que Perrote "anda por todos lados junto con el trabajador que lo atiende, todo mundo ya lo reconoce por el casquito. Tiene hasta un gaffete de Pemex con su foto, como tipo de placa de identificación y viene su nombre, ahí todo mundo lo trae".
Además, agregó que han tratado de llevar al can a una vivienda para evitar riesgos de que le ocurra algo en la refinería, pero que de todas formas se logra escapar y siempre llega a donde está su dueño.
“Cuando el muchacho se iba a trabajar el perro lo seguía en la refinería, todos critican eso pero ya se acostumbró a vivir así, ya todo mundo lo respeta, hay a quienes no le gustan los animales, pero tampoco no le han hecho nada” concluyó Patiño.