Una rarísima condición es la que tiene Fátima Ghazaoui, de Marruecos, quien fuera diagnosticada de xeroderma pigmentosum, la cual se refiere a que su piel se ve dañada por los rayos del sol.
Este padecimiento que sufre la mujer de 28 años, le provoca que su piel no pueda repararse a sí misma después de la exposición ultravioleta y algo de luz artificial. Además, tiene más probabilidades de desarrollar cáncer de piel u ojos, según informa Clarín.
La condición de Fátima se la diagnosticaron cuando apenas tenía dos años tras unas pecas que fueron halladas por sus padres. La marroquí se quema fácilmente al sol, aunque el día este nublado, y presenta signos visibles de piel seca y envejecimiento cutáneo.
"Raramente salgo a la luz del día, pero si tengo que hacerlo debo usar lo que llamo una máscara de la NASA y guantes para protegerme de los rayos solares. Mi día es diferente al de otras personas, paso todo el día en interiores y mi día comienza por la noche" explica la mujer, quien se ve obligada a tener este estilo de vida hace 20 años.
Aparte de los implemento anteriormente señalados, Fátima debe usar crema Factor 90 de Protección Solar a cada hora, para asegurarse de que está protegida.
Aunque la joven sabe que su condición puede terminar con una muerte prematura, ella no baja la cabeza e incluso comparte su caso para motivar a quienes pasen por situaciones similares.