Un lago en Rusia ha sido catalogado por muchos como la "Maldivas de Siberia" debido a sus aguas de color turquesa que asemejan a una playa caribeña. Muchos "influencers" han viajado a la zona e incluso se han bañado en sus aguas.
Pero lo que no saben es que esta tonalidad no es porque sea una playa paradisiaca, sino que se produjo debido a los desechos tóxicos que se arrojan al lago y las autoridades han emitido una alerta para no acercarse a este lugar.
La Siberian Generatin Company, industria a cargo de la planta de energía de la ciudad de Novosibirsk, en el centro sur de Rusia, afirmó que el color turquesa se produce debido a la alta acumulación de óxido de calcio, el que es nocivo para la salud.
El lago tiene carteles que advierten de la toxicidad de sus aguas pero los turistas siguen arriesgándose para obtener la fotografía perfecta para sus redes. Este es el caso de Alexei Cherenkov, quien ingresó al agua sobre un flotador de unicornio y que le produjo un gran sarpullido por dos días.
Pese a que la empresa responsable de esta contaminación descartó que exista radiación en el agua o que ella ponga en riesgo la vida de las personas, advirtieron que "No se puede nadar. El contacto con la piel puede producir una reacción alérgica. El fondo es barroso. Por lo tanto ¡Les pedimos que en sus intentos de selfie, no caigan al agua! Es el principal peligro".
Mira a continuación algunas de las fotografías que la cuenta de Instagram "maldives_nsk" ha recopilado de este lugar: