En medio de un pedido en un restaurante en Ohio, Estados Unidos, que se especializa en cocinar langostas, apareció una rareza que nunca antes habían visto en sus vidas.
Una langosta azul apareció entre medio de cientos de patas y tenazas de estos animales en el local Red Lobster, en donde sus empleados en vez de darle el mismo destino que al resto de su especie, prefirió tomar una sabia decisión.
El crustáceo terminó siendo trasladado al zoológico Akron, en donde se le acondicionó un lugar para su estadía y además se descubrió que era hembra, recibiendo el nombre de Clawdia.
Los expertos señalaron que el color de esta especie se debe a una anomalía genética que le ocurre a una de cada dos millones de langostas.
En tanto, el destino de Clawdia es aún incierto, ya que a pesar de llegar a un lugar donde será protegida, en los próximos meses comenzará a mudar, lo cual hace vulnerables a la langostas, cualquiera sea su color.