En vísperas de la boda más esperada del año muchos han especulado sobre los detalles del evento. Desde los invitados hasta el vestido de la novia, varios ítems son inciertos. Pero hay siete elementos que deben cumplirse sí o sí el día más importante del príncipe Harry y la actriz Meghan Markle.
1. El ramo debe llevar "mirto"
Según la BBC, Meghan llevaría un ramo de rosas blancas y peonias, sus flores favoritas. Pero una flor llamada "mirto" debe estar presente. Desde que la reina Victoria la incluyera en su ramo de novia en 1840, esta flor, símbolo del matrimonio, el amor y la esperanza, ha formado parte de los ramos de todas las novias pertenecientes a la familia real.

2. La novia dejará el ramo en la Tumba del Soldado Desconocido
Esta tradición la comenzó Elizabeth Bowes - Lyon, la madre de la reina Isabel, quién fue a dejar sus flores a ese lugar como homenaje a su hermano Fergus, quien falleció en la Primera Guerra Mundial. En 2011, una vez concluida la ceremonia, Kate Middleton depositó su ramo sobre la Tumba del Soldado Desconocido, situada en el interior de la Abadía de Westminster, la única tumba del templo que no se puede pisar.

3. El novio debe vestir uniforme militar
Otra tradición que se remonta a la época de la reina Victoria, cuando su marido, el príncipe Alberto, vistió de uniforme para la boda. Desde entonces, todos los miembros varones de la familia real, el príncipe Carlos y el príncipe William, han lucido de uniforme. Considerando que Harry sirvió en el ejército británico durante diez años, irá uniformado al igual que su padre y su hermano mayor.

4. Asientos designados
La familia real debe estar sentada a la derecha del altar, si es que es un príncipe el que está contrayendo matrimonio. En el caso que sea una princesa, se ubican en el lado izquierdo.

5. El anillo de la novia debe contener oro galés
La tradición dice que el anillo de boda de la novia debe contener oro de Clogau, es decir oro galés. Hay que remontarse hasta 1923, a la boda de Jorge VI con Elizabeth Bowes Lyon (la reina madre, la bisabuela de Harry), para llegar al origen de esta tradición. La familia real cuenta con una pepita de oro procedente de la mina de Clogau St David, ya cerrada y situada en Bontddu, en el norte de Gales.
En 1981, se entregó a la reina Isabel una pepita de 36 gramos para que se utilizara en futuros anillos, parte de la cual ya fue utilizada la boda de Sarah Fergusson, la duquesa de York. La duquesa de Cornwall Camilla, también lleva un anillo con oro galés, al igual que la cuñada del príncipe de Harry, Kate Middleton.

6. El pastel de frutas
Harry y Meghan ya eligieron el sabor de la torta de novios, que será de limón y flor de saúco. Pero el típico pastel de frutas debe estar disponible, como es tradición en todos los últimos enlaces de la familia real. El pastel de William y Kate tenía ocho pisos y estaba decorado con 900 flores de mazapán.

7. La foto oficial
Una vez concluida la ceremonia, la familia real y la familia de la novia deben trasladarse al Palacio de Buckingham para ser retratados por el fotógrafo oficial. Como sucedió con William y Kate, cada familia debe estar ubicada al lado de su pariente.
