La tarde del lunes 9 de julio fue especial para la familia real, pues fue el bautizo del más pequeño de los integrantes de la realiza. El Príncipe Louis fue bendecido en la capilla Real donde llegaron varios miembros de la familia.
A diferencia de las ceremonias anteriores, esta se realizó en la tarde por lo que los asistentes fueron invitados a tomar el té. Fue en la celebración en que Kate Middleton y el Príncipe William hicieron valer una de las tantas tradiciones inglesas que deben cumplir.
One of the three top tiers of The Duke and Duchess of Cambridge's eight-tier wedding cake will be used for the Christening cake. pic.twitter.com/SVaspn3Rxi
— The Royal Family (@RoyalFamily) 9 de julio de 2018
Los duques de Cambridge sirvieron el mismo pastel del día su boda, un bizcocho de frutas. No solo era del mismo sabor, sino que es parte de la misma torta que se hizo para su matrimonio.
Fragmentos de la torta fueron sometidos a un proceso de conservación y han sido utilizado en los bautizos de los tres hijos de los duques.
Es la cuarta vez que los duques pudieron revivir el sabor del pastel que probaron por primera vez en 2011. El pastel fue diseñado por Fiona Cairns y tenía 17 pasteles individuales y 8 pisos.
Según la tradición inglesa, los padres deben guardar un poco del pastel que sirvieron en el día de su boda y servirlo en el bautizo de su primer hijo.