El rapero cristiano Marcus Gray, más conocido como "Flame", demandó hace cinco años a la cantante Katy Perry, acusándola de copiar una de sus canciones.
Gray aseguró que hubo plagio de su tema "Joyful noise", que compuso el 2009, y que lo usó como base para la canción "White horse", uno de los más exitosos de Perry.
Este martes, un jurado de Los Ángeles, California, le dio la razón a Gray y consideró que la artista "se apropió del ritmo de la canción" y que buscarán formas de compensación por daños y perjuicios.
El juicio duró una semana, donde Katy dijo no haber escuchado la canción del rapero antes de grabar su single, y proporcionó evidencias sobre esta declaración. Y los argumentos de su abogada Christine Lepera, fueron que el parecido entre ambas canciones consiste en "ritmos básicos" y en "el alfabeto musical que debería estar disponible para todo el mundo".
La canción fue producida por Dr Luke, Max Martin y Cirkut, y fue un éxito tras su lanzamiento. Según la BBC tuvo ventas de más de 13 millones de copias y también fue el primer video de una artista femenina en alcanzar mil millones de vistas en YouTube y Vevo.
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