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Bad Bunny no quiere cantar en inglés: “Hay que romper eso de que los gringos son dioses"

Además, asegura que el prejuicio contra el reggaetón nunca acabará. "Es un género que viene de la calle, del underground, de la gente pobre que no tuvo opciones (..) Muchos pudieron abandonar ese estilo de vida y comprarse casa y carro. Yo creo que de ahí viene ese rechazo”, aseveró.

tvn.cl

Martes 11 de mayo de 2021

El cantante puertorriqueño Bad Bunny aseguró que no está dentro de sus metas cantar en inglés y que se siente completamente orulloso de lo que ha logrado sin dejar atrás el español y su acento de origen.

Hay que romper eso de que los gringos son dioses… No, papi (...) Quizá era necesario y abrieron puertas a este boom latino, pero ese momento para mí acabó. Me enorgullece mucho llegar al nivel en el que estamos hablando en español, y no solo en español, sino en el español que hablamos en Puerto Rico. Sin cambiar el acento”, así lo dijo en El País Semanal

El cantante figura como el artista global número 1 de 2020 en Spotify, con más de 8.300 reproducciones. Tiene 29 millones de seguidores en Instagram y 30,5 millones de suscriptores en su canal de YouTube. Uno de sus últimos videoclips, Dákiti, superó los 350 millones de visualizaciones en mes y medio.

 

En la misma entrevista contó que antes de su explosiva carrera musical, empaquetaba bolsas en un supermercado de su pueblo y que pasaba el día analizando a la gente que entraba a comprar.

La música la dejaba para las fiestas. Era en las juntas de su barrio donde cantaba y probaba su voz. Sus videos de esos momentos comenzaron a vitalizarse en Instagram y fue así como un sello independiente llegó a él en 2016.

Además, el Conejo Malo analizó el reggaetón y aseguró que nunca dejará de ser mal visto. "No se va a superar nunca, eso es como el racismo o como la homofobia. Suena feo, suena horrible, no sé si hoy me levanté negativo”, sostuvo.

 

Agregó que "el reggaetón es un género que viene de la calle, del underground, de la gente pobre que no tuvo opciones. A veces, hasta criminales, pero no lo digo de forma despectiva. Gente que salió de la cárcel, o vendían drogas, y al final vio una luz en ese género. Muchos pudieron abandonar ese estilo de vida y comprarse casa y carro. Yo creo que de ahí viene ese rechazo”.

Sin embargo, es algo que no le preocupa. "A mí no me molesta, que digan lo que quieran, hay un mundo entero bailando las canciones, disfrutando de la vida sin prejuicios”, sentenció.