La actriz Kate Walsh, con un gran trayectoria realizando series y películas, se ha destacado en el mundo del espectáculo por su personaje de Addie en la serie "Grey's Anatomy", personaje que llegó a la pantalla hace ya 15 años atrás.
Tan importante fue realizar ese papel en su vida, que las consecuencias fueron más allá de su carrera televisiva, ya que aquella experiencia se le repitió, pero colocándola en el lugar del paciente.
Y es que en conversación con la revista Self, la actriz contó que en el año 2015, después de que se cancelara la serie "Bad Judge", en la cual trabajaba, comenzó a sentirse muy agotada y que incluso su instructor de pilates le habría señalado que su lado derecho se estaba hundiendo.
"Alrededor de abril, comencé a tener más dificultades cognitivas. Se sentía como afasia, pero no era simplemente no poder encontrar palabras; perdía el hilo de mis pensamientos, no podía terminar las oraciones, y ahú fue cuando realmente me alarme" comentó la artista, señalando que posteriormente se dirigió al neurólogo, en donde tras insistir en que le hicieran una resonancia magnética, se le detectó un tumor cerebral.
Walsh expresó que a pesar de interpretar a la doctora Addison Montgomery y haber estado en un set de hospital por más de una década, al momento de la cirugía, se sintió como "un gato asustado". "Fui ruda en televisión pero cuando se trata de ser paciente, es una experiencia muy vulnerable" apuntó.
La emblemática actriz de "Grey's Anatomy", salió bien de la operación y explicó que ahora va mucho más seguido a hacerse chequeos médicos, lo cual recomendó que todos lo hagan constantemente.