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"Deja que duerma": Los consejos que una madre no quiere escuchar

No hagas esto, prefiere esto otro o a mí me funcionó así... Son solo algunas de las frases que algunas madres se resignan a escuchar a diario, pero que suelen desagradar tras el parto.

tvn.cl

Miércoles 3 de julio de 2019

Consejos, frases y reflexiones sacadas de algún libro o de la propia de la propia experiencia, son solo parte de lo que algunas madres deben escuchar sin siquiera haber solicitado "ayuda" durante el embarazo o tras dar a luz a su hijo o hija.

El llamado momsplaining o larga lista de consejos no solicitados llega sin aviso a la vida de embarazadas o madres que, muchas veces prefieren hacer caso omiso o asentir día a día ante cada frase que escuchan.

 

Familiares, amigos e incluso desconocidos suelen "llegar de sorpresa" a visitar a la madre y entregar consejos que, en la mayoría de los casos, no tienen mala intención, pero pueden afectar o molestar a quien espera la llegada de su hija o ya vivió el parto.

La psicóloga Mamen Bueno, explicó el portal El País que: “El embarazo y el postparto son momentos de vulnerabilidad emocional para las madres, muchas de las cuales experimentan emociones ambivalentes y contradictorias hacia sus hijos e hijas. Por eso, por ejemplo, es mejor no aludir a la felicidad, satisfacción y goce que se supone que tiene que sentir una mujer al dar a luz”.

Aunque los consejos tengan las mejores intenciones del mundo, los expertos llaman a analizar esta costumbre social de decirle a una mujer lo que "debería" hacer para criar o cuidar a su hijo.

 

La experta Mamen Bueno frases se refirió a algunos consejos o actitudes que le podrían incomodar o molestar a una embarazada o madre:

1.- ¿Esperas gemelos? Aludir al aspecto físico de una embarazada o del bebé que ya nació resulta imperdonable. La madre se encuentra en medio de constantes cambios físicos y también podría resultar herida profundamente por este tipo de comentarios.

Mamen Bueno explica que las preguntas correctas y acertadas serían: "Qué necesitas, cómo estás, puedo hacer algo por ti… Y dejarnos guiar por las respuestas a esas preguntas”.

 

2.- ¡Hoy vamos conocer al bebé! Solo anunciar una visita, que no se ha pedido, a casa del recién nacido podría resultar molesto, ya que no existe conocimiento sobre los deseos de la mamá o el papá del bebé. En este punto resulta fundamental tener la empatía necesaria para comprender que muchas veces, los padres prefieren estar solos en familia, sin la interrupción de un tercero.

La experta explica que también es importante el tiempo de duración de las visitas, y recomienda que este sea corto y apropiado: “Depende de cómo esté la madre, pero en principio diría que durara lo menos posible. Sea como haya sido el parto, la madre estará cansada y con un festival de emociones importante. El bebé y la madre necesitan tiempo para irse conociendo”.

 

3.- El bebé quedó con hambre... ¡Dale la mamadera! Podría ser uno de los comentarios más escuchados por las madres, junto con aquellos que aseguran que el bebé tiene frío, o gases y que deben hacer esto o lo otro.

"Deja que sean ellos quienes la integren y decidan según sus criterios. Irán descubriendo por su cuenta cómo hacer, buscando sus fuentes de información…”, explicó Mamen Bueno al portal El País.

 

4.- ¡Todo empeora a medida que crecen! Estos comentarios que actúan casi como un anuncio del futuro del recién nacido pueden molestar de sobremanera a los padres debido al mensaje que se puede entender como negativo... ¡Será un demonio! o algo por el estilo.

La psicóloga recomienda no utilizar frases que anticipen el supuesto futuro del recién nacido: "No aportan mucho, y cada niño y niña; y su relación con sus padres es un mundo”.

 

5.- ¡Deja que el bebé duerma! La persona más capacita para saber cuándo y cuánto tiempo dejar durmiendo al bebé es la propia madre, ella está día y noche con él, jamás se despegan. Por lo tanto sería un error sugerir que duerma más, menos, en la mañana o en la noche.

En este punto y en términos generales, la psicóloga aconseja escuchar más y hablar menos, preguntar si necesitan algo, cómo se sienten o cómo podrían ayudar en algún punto de la maternidad.