Lynda Carter, de 66 años, habló con el medio norteamericano The Daily Beast donde dejó al descubierto que, durante el rodaje de la serie "Wonder Woman" en los años setenta, ella fue víctima de acoso sexual.
Si bien no entregó nombres, y mucho menos entró en detalles de lo que ella había vivido, dijo al medio que el culpable era un hombre que había sido acusado por otras mujeres, y todas formaban parte del movimiento #MeToo.
También agregó que no vale la pena dar nombres ya que el abusador ya se encuentra enfrentando un proceso legal. "Él ya está acabado. No hay ventaja en volver a atraparlo. No hay nada legalmente posible que yo pueda agregar. Soy solo otra cara del grupo de mujeres... No quiero que esto sea sobre mí porque no es sobre mí. Es sobre él siendo una escoria", dijo.
En la entrevista también denunció a un camarógrafo que trabajaba en el equipo y que había violado su privacidad al hacer un orificio en la pared de su camarín para luego verla cuando ella se cambiaba la ropa. Sin embargo, esa historia tuvo otro final, ya que al camarógrafo "lo atraparon, lo despidieron y lo sacaron del negocio", agregó Carter.
Cuando le preguntaron a al actriz por qué no había denunciado antes esta situación, ella argumentó que fue por miedo a perder su trabajo: ″¿A quién le vas a contar? ¿A tu agente? ¿Quién te va a creer? Nadie me hubiera creído... Nada más me hubieran dicho: mantente alejada de ese tipo, ten cuidado con ese director... Así es como te protegías: a través de la vida".