El rey Seti I ordena la ejecución de Moisés, luego de que él matara a un egipto. Moisés huye para salvar su vida gracias a la ayuda de Ramsés y de su familia hebrea.
Luego de que Moisés matara a un egipto, no le quedó de otra que huir del palacio.
El Faraón cree que es inaceptable el crimen que hizo y que es una traición, por lo que lo sentenció a muerte.
Moisés huye con su padre Amram al mismo lugar donde él nació, en una alejada cueva al otro lado del Nilo.
Moisés es buscado por los oficiales egipcios en la villa de los hebreos. Cualquiera que sepa del paradero del príncipe será condenado también a muerte.
Jocabed y Miriam van a visitar a Moisés antes de que se vaya definitivamente.
En la casa de Aarón, los oficiales le exigen que diga el paradero de su hermano. Él logra zafar hábilmente.
Cuando llegaron a su hogar, Jocabed y Miriam encontraron todo revuelto y se toparon con los oficiales, quienes le exigieron que dijeran dónde está Moisés.
Henutmire llega al escondite de Moisés antes de que huya.