Safira se robó todas las miradas. La nueva joya de la casa de Senet traerá más de un problema con las otras bailarinas.
Amhos consiguio lo que quería y, por más que se resistió, Safira tuvo que pagar bailando.
Karen está celosa porque le quitaron el protagonismo. Nunca antes vio una reacción como la que tuvieron los hombres cuando veían a Safira bailar.