Los ingleses vieron llegar a Mick Jagger al Estadio Olímpico Luzhnikí y ya se preocuparon, pues el vocalista de la legendaria banda "Rolling Stones" tiene la reputación de "yeta". Es decir: Equipo que apoya, equipo que pierde.
El músico se vio bastante animado y optimista a su arribo, subiendo un corto video a su cuenta de Instagram para apoyar a su país natal.
La "maldición" del músico se vino a la cabeza de muchos una vez finalizado el intenso encuentro entre Inglaterra y Croacia. Los británicos quedaron fuera del Mundial después de una derrota por 2 a 1.
Los ingleses abrieron el marcador a los cinco minutos del partido, con un gol de Kieran Trippier. Hasta ahí todo bien, pero el empate llegó en manos de Ivan Perisic, y los croatas sellaron su paso a la final cuando Mario Mandzukic remató al arco en pleno alargue.
Mick Jagger también estuvo presente en el partido entre Francia y Bélgica, generando tantas burlas en redes sociales después que los belgas se perdieran la final, que Luciana Gimenez, modelo brasileña y madre de uno de los hijos del cantante, salió en su defensa:
“Es ridículo el bullying que le hacen al padre de mi hijo. ¿Acaso también definió la suerte de Brasil? Tenemos que dejar de culpar a otros y hacernos cargo de nuestras responsabilidades”, publicó en Twitter.
Ridículo esse bulling com o pai do meu filho!!! Quem deu azar ao Brasil? Nos temos q parar de culpar os oittoa e tomar responsabilidade nao e?
— Luciana Gimenez (@LucianaGimenez) 10 de julio de 2018
HISTORIAL
La larga lista de "víctimas" de la "maldición" de Jagger se empezó a notar en Francia 98 cuando alentó a Inglaterra frente a Argentina, y que perdieron en los penales. Luego en Sudáfrica 2010 apostó por Argentina que terminó siendo goleada por Alemania por 4 goles a 0.
La más notable fue cuando asistió al partido de Brasil con Alemania en el Mundial del 2014, donde apoyó al equipo anfitrión. En esa ocasión, los cariocas tuvieron la derrota más humillante de la historia cuando perdieron 7-1 contra Alemania.
La lista sigue y es que Jagger ya no puede hacer nada contra su mala fama. Incluso cuando los hinchas le han pedido que apoye a cierto equipo para que fracase, la suerte corre para el lado contrario.